Sigue la progresión hacia Niza

Tras dos semanas sin escribir por razones de trabajo y entreno, retomo este rincón a modo de diario de navegación. Las pasadas semanas han estado enmarcadas por la enorme frustración de no entender las razones que tienen algunos jovenes estudiantes para no encontrar motivación en nada y culpar al mundo de ser el causante, tienden a eludir responsabilidades en lugar de percibir el problema desde una vertiente introspectiva, lo que me gusta esta palabra.

He aprendido muchas cosas, sigo aprendiendo, una de la principales es que tendemos (tiendo) a centrarnos (centrarme) en aquello que no merece la pena, sí, causas perdidas, dejando aquello que sabemos que está bien con la tranquilidad de que no hay problema, sin potenciar aun más esa bondad. Cambiaré totalmente mi percepción mi forma de actuar, centrándome en aquell@s que tenga una predisposición. Un compañero me dijo algo a principio de curso, un alumno debe de venir de su casa, comido, meado, cagado y motivado. Más verdad que un santo.

Las nuevas generaciones, que mal suena esto, los jovenes estudiantes de ahora, algunos, aprenden rápidamente a jugar sucio, quedando al margen valores como la honradez, el esfuerzo, respeto, educación y un largo etcétera de palabras que pronto serán presa de algún museo de retales de la historia, el tiempo sera el juez. No se si esto es parte de un ciclo y tornará a mejores campos de batalla o es parte de un sino que va aniquilando a base de enterrar aquellos valores que hemos adquirido de padres a maestros. Lo que si tengo claro que pese al caldo de cultivo educativo que tenemos soy parte del problema si me rindo. Hace poco leí en un blog algo sobre el papel de aquellos maestros que siempre nos infundieron respeto, moral, educación, que hizo que les tuvieramos un profundo cariño de por vida, todos tuvimos uno/a,al leer ese artículo me vino a la cabeza Doña Dolores. No desespero en buscar el ritmo adecuado que me permina sobrevivir sin fustrarme en este mundo educativo que tenemos.

Vale por hoy, esto es un blog de pensamientos deportivos, así que cambio de tercio. Las semanas pasadas vinieron mucho mejor, sobre todo de ánimo, el Ecotrimad me permitió recuperar un poco la cabeza que andaba perdida en los mares de la negatividad. Pese a la dureza de la carrera, anduve tranquilo y mis sensaciones fueron buenas, hasta la carrera que la cabeza volvió a jugar su baza. Lo que saco que en claro es que con un nivel de concentración adecuado puedo conseguir el reto que me propuse. Al fnal clasificamos para Vitoria e Ibiza, Campeonato de España de de larga distancia, lo peor la fechas, coinciden con el Tri de Sierra Navada (Vitoria) y  el de Ibiza es el 25 de Octubre, muy fuera de temporada, teniendo en cuenta que el 1 de Noviembre de 2010 comencé la mía.

Ecotrimad, TriGranada con el campeón Marcel Zamora, un ejemplo de Humildad.

Tras el Ecotrimad y teniendo en cuenta los contratiempos con mi azotea, decidí, pasar de estrictas jornadas de entreno para hacer lo que el cuerpo me fuera pidiendo con una relgla, situarme entre las 12 y las 15 horas de entreno, las sensaciones fueron las protagonistas.

Esta última semana fue un verdadero tostoneo de entrenos, intenté cumplir aquello que se había planificado para ver como respondía mi cabeza y lo hizo genial, consegúi las 22 horas semanales que buscaba, coronadas con un fin de semana de verdadero volumen. Sabado: 190 km en bici por la Alpujarra con Ugeman , Domingo: 1:15 horas de bici, carrera de las dos colinas y dos horas más de trote sin subir de 5 min/km.

Hay que decir que esta prueba es una verdadera gozada en organización, belleza y dureza. Transcurre por la Granada de calles estrechas y empedradas, un verdadero placer. Durante la misma tuve sensaciones que pocas veces había tenido, salida tranquila para ir tomando pulso, poco a poco fui subiendo el ritmo, sentí que controlaba mis tiempos como quería, al final ritmo de 4:30 min/km .

Foto de Familia. TriGranada.

Foto con mi hermano.

Lo que no cabe duda es que cada día que pasa, TriGranada se hace más grande se estrechan lazos y se viven experiencias de camaradería y verdadera amistad. La vida me está regalando grandes cosas y una de ellas son los amigos que tengo aquí. 

Quedan 20 días para soñar, esforzarse e intentar ser Ironman, cada día tengo más claro que esto no es parte de una pegatina que esboza un mural de sportman completado prueba tras prueba, sino una forma de vivir una filosofía de vida. Saludos.