martes, 28 de junio de 2011

Niza. Operación persiana 2.0

La aventura de vivir te regala situaciones nuevas, inesperadas, pero esta disciplina de sorprende cada día, tu cuerpo reacciona de manera diferente a este duro trámite teniendo que salvar situaciones difíciles, sobreponerse y tomar una decisión entre dos posibles, seguir o abandonar. 

El pasado fin de semana fué un fin de semana deportivo increible. A final de semana UgeMAN (ya si), Victor BernierMAN y Lofer tomaron rumbo A la Costa Azul Francesa, aunque el sol que broncea y las cañas no fueron los protagonistas en esta aveturta, ibamos al Ironman de Niza.


El reto: 225 km repartidos entre agua, asfalto y más asfalto, donde  gafas; gorro; neopreno; una bicicleta;  zapatillas y  visera se convierten en los elementos imprescindibles para esta prueba que se presentaba de primeras "asequible" tras el año de duros entrenos.

Una vez en Niza, la Almuñecar Francesa, nos encontramos con ValvedeMAN y Casi, estaban recien levantados, le entregamos su bici y quedamos para más tarde. El paso siguiente era levantar el campamento,  Hotel Massena, un hotel tranquilo con el suelo enmoquetado y una persiana difícil de gestionar, je, estos gabachos...
Hotel en el paseo marítimo.
El plan; hacer el check in en el hotel y lanzarnos a Niza a ver el ambiente deportivo que había. Ya en la fería del corredor llamamos a Chico otro Granaman que había partido días antes con su caravana y su ahijada Erin, al reponderme pude comprobar como dominaba ya el idioma francés, en tan solo unos días parloteaba un perfecto gabacho.

Pronto pudimos comprobar que nuestro AnchoillaMAN y su ahijada Erin estaban más cerca de lo que pensabamos, justamente a la entrada de la feria del corredor, montada cuan feria medieval donde se vendía cualquier elemento de triatlón que pudieras imaginar; como no, ya había hecho de relaciones públicas y nos presentaba a su amigos triatletas.

Chico "relaciones públicas"


Recogimos el dorsal y echamos un ojo para ir seleccionando que nos llevaríamos de recuerdo, craso  error por que todo lo intersante voló para el siguiente día. Tras el paseo tocaba reponer fuerzas e ir al hotel a descansar un poco, fue una dura noche de coche y confesiones. 


Victor nos relato durante el viaje, su experiencia en Estados Unidos como investigador, una historia emocionante en la élite de la ciencia mundial  que se vió truncada por el 11-S , tras este hecho decidió regresar a casa a seguir con los negocios familiares y desde aquí realizar sus proyectos deportivos. Victor ve preparando la maleta para el año que viene no puedes faltar.

Por  la tarde nos fuimos a la playa, quizás nos habíamos equivocado de lugar ya que el paisaje parecia más granadino que francés, no solo por las típicas piedras sexitanas sino por el litoral que tenía  a su alrededor. Por nuestro alrededor estaba un tal Marcel Zamora con la que debía ser su chica.


La noche fue tranquila, David Valverde y Casi nos llevaron a un italiano donde pudimos comprobar que hay restaurantes que no tienen medida, en lugar de platos nos pusieron palanganas repletas de una rica pasta. De postre un flan que seguro tendría más de medio kilo.

Durante el fín de semana de la  prueba me llamó mucho la atención la ilusión con que UgeMAN vivió todos los momentos, humilde y reservado como siempre se le veía emocionado ante la que se convertiría en su prueba soñada, respiraba ilusión, como pude comprobar en sus comentarios solo le faltaron dos guindas en ese pastel dulce que se estraba fraguando para el día D, MM y su enano TriAriel, la próxima  seguro que se unen a la expedición.

Tras la cena en el italiano, paseo por las calles de Niza, un estilo puramente mediterráneo, la calle donde caminábamos era muy parecída a la calle Larios de Malaga, hubo helado italiano para algunos.

A la mañana siguiente, siguiendo el consejo de David "apañao" man nos dispusimos a ir a un típico cafe de Niza a tomar un "petit déjeuner", en cateto el pequeño almuerzo, en francés desayuno, compuesto por cafe, zumo de naranja, barra de pan, mermelada y mantequilla, un autentico desayuno de campeones.


Tras el festival alimenticio fuimos a rodar objetivo una hora que se prologó por la subida que hicimos al mini puerto de 500 metros al 14 % un tostoneo increible que te dejaba sin aire al final.

COMIENZA LA PRUEBA.

Para mí una prueba se inicia cuando comienzas con los preparativos antes de entregar la bici a boxes. Tres bolsas, una para la ropa de calle, otra para lo necesario para la bici y otra para la carrera. Nueve números/dorsales; colocados: uno en cada una de las bolsas, tres en el casco, dos dorsales y otro para la tija de la bici. Esto podría haber quedado más visual con la foto explicativa pero, mi camara paso a mejores manos, espero que la disfrutes hijo/a de la gran Francia.

Los boxes eran inmensos, largos como ellos solos, con una sección inicial de bici, otra sección para dejar la bolsa de la T1, y la última sección para dejar la bolsa para la T2.

Cenamos a las 19:00 en el mismo lugar de la pasta y rápido para la cama. El reloj sonó a las 3:50, nuestro objetivo era desayunar en Sport 11 un bar asociado al Ironman donde anunciaban a bombo y platillo que daban desayunos la mañana de la prueba. El problema fué que se mezclaron los ambientes, la noche glamurosa y etílica con la deportiva, donde los intereses no cuadran, donde unos tienen cara de...  ¡madre mia lo que me espera¡ y otros de que feliz soy y que ritmo tengo. Allí, Erín, Chico, Valverde, Casi, Uge, Victor y Lofer, viendo un panorama subrealista.

Tomando minicafes antes de la prueba.
Los propietarios del pub vieron el tema y cortaron el grifo de inmediato a los trasnochadores Nizardos/as. La mesa más cercana a la nuestra era una estampa, cinco rantamplanes bebiendo vodka solo como machotes y otros dos  luchando y quemando  sus últimos cartuchos como gentelman a ver quien era el triunfador de la noche, el objetivo una madurita ébria, bajo sus pies un perro que seguro que andaba ya hasta los "güitos" de la marcha de su dueño.

Los minutos pasaban  y nuestro desayuno no aparecía, los propietarios más nerviosos y los rantamplanes cada vez más contentos, los gentelman más cariñosos y la madurita ebría con una sonrilla tan grande como su cogorza, estaba tan agustito....

Al final todo mezclado trae como resultado una conga de insultos empujones, agarrones del cuello y de "te pegos leche", nuestro desayuno sin venir. Ya el problema no era la pelea si no que no tenían pan, llegaba en breves decían, tras una larga espera, un chupito de cafe malo y unas tostadas acolchadas  con sabor a gelatina de pseudo fresa, nos fuimos raudos y veloces ya que nos quedaban 30 minutos para que cerraran boxes.

SUENAN TAMBORES DE GUERRA.

Nos encaminamos a la zona de entrada, Uge me comenta, killo nunca había tenido esta sensación,  en triatlón, solo cuando competía, estaba emocionado, ¡dios¡ recuerdo mi primer Ironman y se que son unos momentos que nunca más se volverán a repetir, emoción y duda conviven.

Cuando me dirijo a mi posición de la bici oigo el que es el sonido que más  asusta, que más me estremece en una prueba de triatlón y es el ruido que se oye cuando estalla una rueda por el exceso de presión y los siguientes murmullos. Como no puedes tocar la rueda o eso dice el reglamento debes dejarla tal cual y cambiarla al salir del boxes.

Hincho las ruedas, me pongo el neopreno, ¡zas¡ una raja en la pierna, las prisas no son buenas, sin mojar que esperas Lofer, blanco y en botella. Cinco minutos cierran boxes debo de entregar la bolsa blanca, Uge me está esperando y de camino vemos a Valverde, Casi nos llama para una foto posamos y nos dirigimos a la entrega de la bolsa blanca de calle.


En la playa se puede percibir el ambiente a nuestras espaldas el público con camaras y flashes, se oye música que te pone las pilas, dos speaker animan la salida, increible el ambiente que se percibe. Salida,  una lócura, golpes y más golpes imposible dar una brazada correcta y comoda no hay sitio para abanzar no hay hueco, imposible. Me acuerdo de los apodos de los sujetos que nadan en la piscina, sonrío mentalmente, aquí somos intratables.


¡SALIDAAAA¡


Un horror que dura la primera vuelta, noto que nos desviamos y como una canoa pita el grupo que llevaba nos hemos ido de rumbo, toca rectificar, ya puestos que más nos da un kilómetro más que menos si esto es un Ironman.

Salgo del agua 13 minutos después de la hora, veo delante de mí a Victor, corro todo lo que puedo para mi sitio en boxes, noto como el desayuno ha sido pequeño tengo el estomago perfecto, cojo la bici y me dirijo a la salida.

 Los primeros metros bien, luego empiezo a sentirme fatal, desfondado, el cuenta kilómetros no me funciona, paso, sensaciones al poder, mareo, intento comer no me entra nada de comida, hasta el segundo avituallamiento (km 409 peno como una misionero, mantengo buen ritmo pero voy sufriendo.

 Pensamientos negativos, quiero retirarme, el calor se hace sofocante, pienso en todo menos en la carrera, evoco situaciones que me hagan evadirme,  pero nada, los 40 km primeros una tortura psicológica,  entro en la cuenta que este Ironman y debido a las últimas semanas de trabajo no lo he preparado como debía en cuanto a la estratégia de carrera, esto me hunde más, así que toca improvisar.

Mi oasis en el segundo avituallamiento, un bote lleno de cola me dio la vida, empece a sentirme mejor y poco a poco a recuperar mi cabeza y mi cuerpo, más no iba a durar sin nada en el estómago, dos geles tras el bote de cola, media barrita y casi media botella de agua, tenía gasolina para un rato.

La bicicleta es como el recorrido de la  Cabra, me recordó mucho a ella, sin fuente, pero de este estilo algo más larga, aunque las referencias en el dibujo de la organización nada tenían que ver con lo que nos estabamos encontrando. Bastante drafting y jueces que pasaban de largo, los gendarmes un trabajo impoluto, siempre visibles con sus trajes azules y motos que dirigían perfectamente el tráfico.



Me quedo con el puerto el Col de l´Cre, subida con buenas sensaciones y adelantando a gente, me llama la atención una triatleta del grupo de edad 45/49 que sube muy bien, la adelanto pero no puedo descolgarla, me adelanta y la vuelvo a adelantar y así hasta arriba, increible no se como llegaría pero seguro que entre las primeras de su grupo, llevaba un ritmo tremendo.

Hay un tramo en la carrera que me cruzo con Tapia y Uge, van geniales, están algo lejos y ahora toca bajada, voy a ver si los pillo. Caida delante de mí, acojonitis aguda, aminoro la velocidad que todavía queda carrera.

La llegada al llano estuvo protagonizada por los jueces, empezaron a obligarnos a guardar la distancia reglamentaria después de una larga jornada de drafting, es imposible no hacer drafting en una prueba con 2500 participantes.

Los últimos kilómetros con viento de frente duros como ellos solos donde intente apretar al máximo, la llegada a la recta de meta apelotonada y relajando piernas comenzaba la verdadera batalla.

CORRE CORRE PERO TEN CUIDADO QUE LLEGAN LOS CALAMBRES.

Transición buena 3:50, me pongo un cinturon lleno de geles; parezco un vaquero del oeste, sonrío cuando evoco esa imagen. Y a correr, increible tengo las piernas como si flotara, nada cargadas, la boca algo seca, me cruzo con Tiburon Tapia, un autentico ejemplo de pundonor y fuerza mental, corro a 4:30 los primeros 7 km, en el kilómetro 8 llegan, bienvenidos calambres, entren, acomodense en mis piernas estan en su casa, la falta de hidratación empezó a pasar factura, así que tocaba bajar el ritmo para evitar problemas, golpeo mis piernas cada vez que me dicen hola los calambres, alivia.

La carrera fue un continuo ir y venir calambroso, así que ya que estabamos aquí llegaríamos fuese como fuese. Primeramente piensas que no has entrenado lo suficiente, pero a toro pasado me doy cuenta que gracias al entreno pude sobrevivir a el dolor que sentía y a los momentos críticos en carrera. Aprendemos a luchar a no desfallecer, te sobrepones a todo con una intención, llegar.

 Durante el fin de semana lo comentabamos con Uge y Victor, en USA te preguntan si lo has terminado aquí tenemos la manía de preguntar por el tiempo, despues de todo compites contra tu cabeza, contra los planes que te haces en ella, pero puedo decir que llegué, tras 11: 39 Horas, donde aprendí cosas que pondré en práctica en futuros retos. 

Después de 4 vueltas te ves encarando la linea de meta, la gente te echa la mano para que la choques increible la llegada, medalla y otro reto conseguido.  Me quedo con los abrazos con los compañeros, Uge, Tapia, Victor, Ruben, David, Gonzalo, Chico fue el único que no ví. Fuimos unos Granamanes.




Un fin de semana lleno de recuerdos, convivencia inmejorable como siempre, gracias a Uge, Victor mis compañeros de viaje, nunca olvidaré estos momentos. Uge nunca olvidaré el año de entrenos y los abrazos del final, lo de la persiana queda en secreto no es cuestión de quedar como catetos, todo tiene su mando en la vida. 

Un guerrero de la luz nunca olvida la gratitud.
Durante la lucha, fue ayudado por los ángeles; las fuerzas celestiales colocaron cada cosa en su lugar y permitieron que él pudiera dar lo mejor de sí.
Los compañeros comentan: "¡Qué suerte tiene!". Y el guerrero a veces consigue mucho más de lo que su capacidad permite.
Por eso, cuando el sol se pone, se arrodilla y agradece el Manto Protector que lo rodea.
Su gratitud, no obstante, no se limita al mundo espiritual; él jamás olvida a sus amigos, porque la sangre de ellos se mezcló con la suya en el campo de batalla.
Un guerrero no necesita que nadie le recuerde la ayuda de los otros; él se acuerda solo y reparte con ellos la recompensa.
PAULO COELHO
GRACIAS A TODOS POR ESTOS MOMENTOS INOLVIDABLES.

8 comentarios:

  1. Coitus interruptus, para cuando la segunda entrega?? En ascuas...

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  2. QuePufQuePaf: No sería que no sabíais cerrar la ventana y os pegasteis la noche en vela? XD
    Un abrazo

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  3. Muy bueno el relato. Va a querer Dios que de aquí salga un nuevo Sanchez Dragó...gracias por todo illo, sta to pollúo

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  4. De pelos como escarpias, enhorabuena hermano.

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  5. Enhorabuena, Lofer! Tiene muchísimo mérito acabar un Ironman, pero más si tienes que recuperarte de un bajón en el km 40 de la bici. Enhorabuena también por la estupenda crónica. Eres un crack!!

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  6. Estabas para hacerlo mejor pero hiciste un tiempo muy bueno... fue durisimo por el calor... pero a mi no me digas de mas ironmanes, que yo ya no quiero mas!

    Victor

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  7. Por cierto, fue un honor compartir viaje y momentos ironman con los 2 maquinas (Uge y Jesus) y luego alli con el resto

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